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Año 2005 (Enero–Diciembre)
LAUDETUR JESÚS CHRISTUS IN AETERNUM
Trascripción de las cintas realizada por un devoto del Sagrado Lugar.
Mensaje de la Madre a Rosario Arenillas CRUZ BLANCA, 9 de Julio del 2005
Este mensaje tuvo lugar en el Santuario del Inmaculado Corazón de Maria, estando el P.P. Félix de cuerpo presente.
Rosario:– ¡Madre, Madre... Ayúdame Madre mía!
Madre:– Vengo para darles las gracias y decirles a todos que los momentos son importantes, porque todo aquél que es esclavo en la Tierra, es un desconocido para gran parte de la humanidad, y cuando llegan a mi Hijo, son los únicos que despiertan para entregarse a aquél que negaron y que no quisieron reconocer.
Por eso todos juntos, quizás, quizás con el llanto no puedan pagar. Solamente, solamente con el testimonio que deis cada uno, porque ya él está acogido por los brazos del Padre.
Él ha ganado su Gloria amando a los demás. Amando a aquellos que apenas lo entendieron, aquellos que nunca reconocieron en ningún momento el significado de la palabra, aunque la Palabra no es lo que está escrito en un folio de papel. La Palabra, es aquello que nace en cada uno de ustedes y pueden darlo a los demás y hacerle el mejor regalo, y es lo único que ha hecho él. Regalarles y regalarles ¡tantas y tantas palabras nacidas en su corazón y que muchos y muchos de ustedes no han sabido comprenderlas!
Pero él ha dejado muchas huellas y por esas huellas tenéis que guiaros muchos de ustedes, para que sean ustedes el camino de tantos hermanos; porque no solamente los maestros dan lecciones, también los alumnos pueden llevar a muchos hermanos al Reino del Padre, porque solamente la Cruz no puede ponerse sobre un hombre, hay que compartirla entre todos y ahora son los momentos más importantes.
Ahora es cuando tenéis que luchar y estar hombro con hombro, todos unidos para que a este lugar pueda ocuparlo un sabio, que sea sabio y santo, porque el sacerdocio lo "harán" ustedes solamente según sean ustedes capaces de arroparlo; porque el sacerdocio, hay que hacerlo, porque vendrán de varios lugares a éste lugar a que siga viviendo por voluntad de él... porque él no se ha ido con la manos vacías, él ha llegado al Padre con las manos muy llenas.
Ha llegado al Padre con llanto en su corazón por no poder hacer todo aquello que tenia previsto, pero no era voluntad de mi Hijo, solamente era voluntad de él.
Él ya había cumplido su misión y ya son ustedes los que tenéis que seguir luchando para que ese Santo y Divino lugar que no tiene otro nombre, no decaiga en ningún momento.
¡Que sean ustedes la voz! ¡Que sean ustedes la palabra, y no la que está escrita en un folio! ¡Que sean ustedes la palabra que despierte al mundo dando testimonio a tantos y tantos que van pasando de largo equivocadamente porque no saben el nombre de mi Hijo!
No sabe más aquél que cree que puede dar lecciones, sino aquél que sabe escuchar y abrazarse a la Cruz y decir: ¡Ayúdame Señor porque mi corazón está dispuesto a complacer a todos los hombres!
Por eso hijos míos, esta bendición que hoy vengo a dar es para deciros: ¡Muchas Gracias, ¡Yo estaré con vosotros en todo momento! ¡No estáis solos, pero él ya no está con vosotros!.. ¡Solamente está el sayo! ya su espíritu está en las manos del Padre y desde allí será su labor mucho más importante que la que ha tenido en la tierra.
Aquí solamente ha sabido tomar la medicina suficiente para curar el Alma y abrir las fuentes para que puedan orar. Desde arriba, será pescador para pescar tantas almas que están enfermas y que no pudo en la tierra llevarlas a su rebaño.
En los brazos del Padre contemplará a tantos hermanos suyos y les dirá: ¡Cuanto tiempo! ¡Cuanto tiempo de allí para acá y no habéis comprendido cuál era la misión de cada uno de ustedes! ¡ La misión no es levantar la voz y señalar a un hermano! La misión es bajar la cabeza y ponerse delante de un hermano y mirarlo cara a cara diciéndole: "por mucho que me humilles, mi fe no la vas a lastimar, porque mi fe es el mejor regalo que he recibido".
Por eso hijos míos ha sido el maestro.
El maestro de la nada y el maestro del todo, porque ha navegado en un barco y no tenia océano, solamente tenia obstáculos y obstáculos donde el barco se golpeaba y se golpeaba en tantos momentos, y ha sabido conducirlo y purificarlo ante tantos hermanos y decirles: "¡No voy a rendirme en ningún momento! Quiero dar hasta los últimos momentos a Aquél que me llamó por primera vez sin saber para qué, porque ni yo mismo supe comprenderlo".
Por eso hijos míos uniros a ésta bendición que Yo hoy quiero entregarles a todos ustedes.
Rosario:– ¡Madre, Tú eres para mi lo más grande... pero hoy no quería verte porque estoy hundida!
Hoy me has herido el corazón... pero bendita sea tu voz que tantas... ¡que tantas veces me ha herido el corazón al ver tu rostro lleno de sufrimiento y el desprecio de tantos hermanos míos!
Madre:– NOS ABRAZAMOS LOS DOS Y NOS COMUNICAMOS SIN LLORAR Y SIN LÁGRIMAS.
QUEDAMOS VÍCTIMAS DE LA TIERRA, PERO ERA EL MEJOR REGALO QUE PODÍAMOS ENTREGARLE AL PADRE. POR ESO HIJOS MIOS, LOS DOS UNIDOS, NOS ABRAZAMOS... Y ASÍ LO ENTREGUÉ AL PADRE... ... SIN REPROCHARLE UNA PALABRA.
Por eso., doy las gracias a aquellos que han sabido comprenderlo. A aquellos que han llorado a tiempo... a aquellos que han sabido dar algo tan pequeño y tan importante.
Por eso, hijos míos: ¡Sed correctos!, ¡sed correctos!
¡No hacer nada que pueda lastimarlo!
¡Que todo cuanto mováis a su alrededor sea sencillo y con amor!
Que no sirva su retirada para un espectáculo para los demás. Que solamente sirva para poder decirles adiós. No para siempre, porque ahora es cuando lo tendrá más próximo en cada uno de ustedes, y PIDO QUE NO SE DIVIDAN USTEDES. ¡QUE SIGAN USTEDES UNIDOS! ¡QUE NO HAGAN USTEDES "PEQUEÑOS REBAÑOS" Y EN CADA PEQUEÑO REBAÑO QUIERAN RENACER UN PASTOR Y PREPARAR DISTINTAS OVEJAS!
Que sigan ustedes viviendo las palabras de aquél pastor que lo dio todo por nada, solamente preparó los caminos de cada uno de ustedes. Por eso hijos míos, Yo en verdad, en verdad os digo, que seáis ustedes mismos.
¡Que sepan ustedes abrazarse a la Cruz, y que no se haga pesada! Que a todo les deis el mismo nombre...
PORQUE LLEGARAN LOS MOMENTOS NO MUY LEJANOS... NO MUY LEJANOS, QUE TODO SALDRÁ A LA LUZ...
TODO SALDRÁ A LA LUZ, PORQUE TODAVÍA LA SILLA DE PEDRO NO HA DICHO LA ÚLTIMA PALABRA; ESA SILLA DE PEDRO QUE ESTÁ PRISIONERA Y NECESITA GRANDES Y SABIOS HOMBRES DE LA TIERRA PARA QUE DEN TESTIMONIO PORQUE MUY PRONTO, MUY PRONTO ¡QUEDARÉIS HUÉRFANOS!
Quedaréis huérfanos y solamente recordaréis la voz de él. La voz de sus dulces melodías, de esas dulces melodías que hablaban de mi Hijo; que "cuneaban" al Padre con sus palabras, y que sus palabras me elevaban y me hacían prisionera en su corazón.
Ésas son las palabras que tenéis que recordar cada día. No las palabras de uno que se fue, sino de uno que por su propia voluntad hizo la "entrega" correctamente Y ABRAZADOS LOS DOS, NOS PRESENTAMOS AL PADRE.
SU ESPÍRITU NO QUISO VOLVER, pero el Padre me mandó a la tierra para calmar y decir: ¡No convertir el tiempo en tiempo vano!
¡Aprovechad hasta el último segundo que puedan ustedes vivir, para ser correctos y transformarlo todo!
¡No equivocaros ni dejad que vuestras mentes estén vagando ni "encervando" cosas que ustedes no vais a poder curar!
¡Dejarlo todo en las manos de mi hijo, que lo va a curar todo!
¡Ustedes, solamente aprender a respetar y no enfrentarse a tanta corrupción como Satanás está sembrando en esta humanidad corrompida!
Ustedes, SEGUID CON VUESTRAS MISIONES; LA QUE YO HE QUERIDO ENTREGARLE A CADA UNO.
Tener fuerza para amar e inteligencia para callar ante la corrupción de los demás, porque ellos mismos tendrán que dar cuenta y presentarse al padre y sentirán su vergüenza.
¡Será tan grande el sentimiento que tendrán, que tendrán que arrepentirse!
¡Por eso hijos míos el silencio es lo MAS IMPORTANTE!
Y ahora Yo, en el nombre de mi Divino Hijo y en el nombre de él (P.P. Félix), desde los brazos del Padre, les suplico.
¡Ya lo tiene! ¡Ya tiene lo que él quería! ¡Lo que yo tantas veces les anuncié y no comprendieron los hombres!
Tantas veces le llamé distinto á los demás y los demás se preguntaban que ¿por qué él y no yo?..
Porque cada uno de ustedes tiene una misión.
Si algún día yo pudiera explicárselo, temblarían ustedes porque la tierra se les haría tan pequeña tan pequeña, que no podrían ustedes ni abrir una mano para salir a flote... porque es tan inmensa, tan inmensa la misión de cada uno de ustedes, que sentirán el premio más importante que mi Hijo pueda entregarles. Pero no será el premio que vaya envuelto en un folio para que ustedes puedan descubrirlo, solamente podréis descubrirlo en el corazón y decirle: ¡sigue pronunciando, sigue pronunciando lo que no he visto en un folio! ¡Sigue pronunciando para que aprendan los demás y puedan comprender lo que es la perfección, lo que es la fe... lo que es el nacimiento que no tiene muerte!
Lo demás, todo tiene un final, pero la Fe no tiene fin en la tierra. La Fe, solamente es como una sierra de dos filos, y que un día está de lado, y otro día lo está segando todo; pero sólo siega la mala cizaña que Satanás está sembrando en la mente de todos.
¡Escudriñar todos unidos la buena semilla, porque mi Hijo, con esa buena semilla y unos cuantos hombres, ha construido grandes graneros donde se les espera, y hay para todos!
Por muy pequeña que sea la semilla que lleven ustedes, que sea limpia y no vaya manchada con cizaña.
¡Por eso, pensad, pensad que no solamente con beber de mi Hijo podéis purificaros!
Quizá podéis purificaros dando testimonio, y no levantando la cabeza ante las malas palabras de los demás.
Enseñad con humildad y sencillez a aquél que no sepa hablar y así caminarán todos ustedes por el mismo camino.
Y ahora, mi bendición es para todos:
En el nombre del Espíritu Santo, en el nombre de ésa victima de la tierra y un alma purificada en los brazos del Padre, mi bendición es para todos.
Rosario: –¡Madre, te doy las gracias! ¡Adiós Madre... adiós Madre!
Madre:– El que se resiste, nunca llegará al padre, por eso, ¡sed dignos!
Rosario:– ¡Adiós Madre! ¡Gracias por el último abrazo al llevártelo!
Que yo un día también pueda sentir tu mano para irme Contigo que ya no me importa nada.
¡Enséñame a respetar a todo aquél que me rodea!
¡Enséñame a guardar silencio Madre mía!
¡Enséñame a armar de valor a los que no lo tienen, porque para mí, los que más valor tienen, son los que no tienen un lugar!
Enséñame a que yo pueda tener un lugar por muy pequeño que sea para darlo a los que no lo tienen. . . ¡Ayúdame a amar a mis hermanos!.. Quiero estar sola Madre mía.
¡No tengo por qué llorar! , yo se que tú. . . que este lugar no quedará vacío.
Yo sé que tú pondrás lo más importante, lo más correcto.
¡Lo espero Madre mía! Ayúdame.
(Transcripción literal de la cinta, por Hugo Antonio Antón, devoto de la Cruz Blanca).
NOTA:
Se comunica a los devotos y amigos de la Cruz Blanca, que en la madrugada –cuatro treinta horas (4'30 h.) – del viernes ocho de Julio del corriente (8–VII–05) falleció en su domicilio y en el seno de la Santa Madre Iglesia el P.P. Félix Ma Arana Arenal siendo su cuerpo expuesto y velado en su Capilla –Santuario del C.I.M.– hasta las diez cuarenta y cinco horas (10'45 h.) del sábado nueve.
Fue trasladado en coche fúnebre y acompañado por familia y devotos hasta la Parroquia del pueblo El Palmar de Troya donde se celebró la Santa Misa y un sentido funeral.
Posteriormente sus restos mortales fueron sepultados en UTRERA. Damos las gracias al señor Párroco por su inestimable ayuda y consideración y también al señor Alcalde y autoridades públicas por su apoyo.
AMIGOS CRUZ BLANCA
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